domingo, 7 de diciembre de 2008

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Lo normal no es normal porque sea normal. Lo normal es normal porque es triste.

La normalidad me entristece. No porque ésta sea normal, sino porque (y el enunciado anterior me apoya) es intrínsecamente triste.

¿Qué es lo normal? Quizá tenga que hacer esta aclaración (¡sí, tengo que hacerla, tengo que definirla, para no dar lugar a equívocos -y por favor no confundas el término equívoco con el término interpretación-!) Lo normal es aquello cuyo comportamiento es previsible. Es aquello que, con un poco de ejercicio contemplativo, puede determinarse, sentirse, saberse, antes de su fin.

La gente ya vive preparada para lo no-sorpresivo. La gente ya vive preparada para la normalidad. Y es por eso por lo que la gente anda triste, pues ha perdido, no tiene, la capacidad para el sobresalto.

5 comentarios:

  1. Lo normal es lo que se ajusta a la norma. ¿Es la norma estar triste? No tengo ni idea. Sería anormal no estarlo de cuando en cuando. saluts

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  2. Lo sorpresivo es mucho más intenso que lo normal. Pero no menos triste.

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  3. Jeje... me alegro de incorporar nuevos léxicos a tu día a día. Y nuevos chotones, porque ya habrás visto Scott Bakula cómo se las gasta(ba). Ya ves que no todo es "normal", por suerte.

    ;-)

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  4. No tiene por que ser triste lo normal. Ni siquiera lo cotidiano, solo lo rutinario acaba produciendo tristeza. Pero ¡ojo! de lo normal a lo cotidiano y (aun más) de los cotidiano a lo rutinario solo media una actitud: la del que abomina (o es incapaz de ver) la infinita capacidad de sorpresa que se esconde tras los pliegues de la normalidad.

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  5. Las personas no normales (como yo) a veces estamos muy tristes de ver que las personas normales han perdido la capacidad de sorprenderse con nosotros.
    Cosa que me sorprende.

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